jueves, 21 de mayo de 2009

Cronica 1, batalla a gritos

Pasaba el ejército, tranquilo por ese valle, caminando a orillas de ese río interminable, acudiendo a su normal labor, de hacer las aguas moverse, de que pasasen con tranquilidad hermosa. Llevaban un rato ya en su labor, cuando apareció la armada, desenvainando espadas, y dividiendo las aguas, se aglutinó una trinchera, del lado sur del río, mientras que la enemiga se congrego en el lado norte, y comenzó la batalla, lanzando cada uno sus gritos, desgarrando las gargantas, para evitar que el río corriera por donde el territorio enemigo, la armada se separo, para intentar cubrir mas territorio, extendiéndose por toda su orilla del río, mientras que el ejército se decidió a unirse, y mantener defendido su territorio, el río se dividía, las aguas empezaban a desbordarse, nadie había notado aun que las aguas estaban agitadas, que la creciente llovizna se había tornado en una lluvia ligera, seguían agitando las banderas de su propia identidad, partiendo con los gritos el aire, deteriorando el sonido de la lluvia de un campo fresco y puro, el ejercito recibió refuerzos, y ahora tenia dos bastiones, la lucha parecía ahora inclinarse hacia el lado del ejército, las aguas parecían mas correr hacia los campos del ejército, y sucedió, en el momento en que el ejército logro acallar los gritos de los soldados de la armada, cuando la batalla estaba ganada, y la armada aun batallaba, el cielo rugió, con un rugido mortal, haciendo caer la lluvia con un ímpetu de quien se quiere lavar de alguna extraña suciedad, con las ganas de quien no soporta ver mas una batalla, y la armada se dispersó, el ejército se reunió, y ya congregado partió, se alejó entre la lluvia, su propósito estaba cumplido, las aguas que de ese río pudo tomar las tomó, ahora se tornaban grises, de un color mucho mas turbio. El ejército partió, y la armada regresó, a tomar lo que aun quedaba, y recoger algunos muertos.

1 comentario:

F. Iniri dijo...

Gloria a aquellos que con su sola voz ganan batallas, que con su solo grito calman las aguas y que con la encarnización de su garganta hacen llorar al cielo...No estoy seguro de que quiero decir, pero gloria, oh gloria!!!